GRACIAS, NO HAY DE QUE
ARTÍCULO DE: Lorenzo de Ara Rodríguez
¿Puedo? Gracias. Pues verá, como hago algunas veces, y sin más interés que el compartir una lectura
interesante, le invito, sapientísimo lector, a que se glorifique con Jiménez Lozano, Premio Cervantes y colaborador de La Razón. Su artículo, brillante y preciso, es un aldabonazo en la cabeza de los inventores de historias que no conducen a ningún sitio. Bueno, tal vez sí: conducen a la desesperación y a esa realpolitik de la que obtienen provecho los mofletudos de la sabiduría progre. Aquí está la puerta que lleva al escritor: http://www.larazon.es/noticia/1106-adaptaciones-historicas-por-jose-jimenez-lozano
Pero si lo que quiere es un poco, apenas nada, de dulce paseo por la taciturna lectura de un sabio, entonces aproveche la ocasión y abrácese a José Luis Alvite, también en La Razón. No es lluvia, es algo más; no es la añoranza de un tiempo gris, norteño; es la placentera y fugaz aparición de lo bien hecho. Pase y lea con libertad: http://www.larazon.es/noticia/4625-la-chica-de-la-lluvia
Aquí en Canarias, supongo, está mal visto que un isleño muestre su apoyo a los toros. La Fiesta Nacional. (¡Ganas de tocar los cojones!). Un perdedor nato, o sea, el menda lerenda, aprovecha la ocasión,-dicen que siempre aparece pintiparada- para que ustedes lean a Mario Vargas Llosa, ya que el peruano, español y no sé cuantas cosas más, todas positivas, despliega su saber en El País para apostar una vez más por el toro, por la fiesta, por el arte, por la vida. ¿Quiere? Pues aproveche: http://www.elpais.com/articulo/opinion/Torear/otras/maldades/elpepiopi/20100418elpepiopi_11/Tes
Gracias.
Y de paso, si puede, deje de prestar atención a lo que de vez en cuando se dice o se escribe sobre nuevos proyectos políticos locales. No le eche la culpa ni se desahogue con los escribanos. Lo que tiene que hacer es no prestarle atención a los protagonistas que en el fracaso ideológico, cabreados y apartados, pretenden convertirse en pequeños salvadores de patrias chicas. Y siempre desde la izquierda. ¡Faltaría más! Aunque no dude en pensar, que el fracaso se ha instalado en la política de esquina, en la política de navajazo y garrote que impera en el pueblo
¿Puedo? Gracias. Pues verá, como hago algunas veces, y sin más interés que el compartir una lectura
interesante, le invito, sapientísimo lector, a que se glorifique con Jiménez Lozano, Premio Cervantes y colaborador de La Razón. Su artículo, brillante y preciso, es un aldabonazo en la cabeza de los inventores de historias que no conducen a ningún sitio. Bueno, tal vez sí: conducen a la desesperación y a esa realpolitik de la que obtienen provecho los mofletudos de la sabiduría progre. Aquí está la puerta que lleva al escritor: http://www.larazon.es/noticia/1106-adaptaciones-historicas-por-jose-jimenez-lozanoPero si lo que quiere es un poco, apenas nada, de dulce paseo por la taciturna lectura de un sabio, entonces aproveche la ocasión y abrácese a José Luis Alvite, también en La Razón. No es lluvia, es algo más; no es la añoranza de un tiempo gris, norteño; es la placentera y fugaz aparición de lo bien hecho. Pase y lea con libertad: http://www.larazon.es/noticia/4625-la-chica-de-la-lluvia
Aquí en Canarias, supongo, está mal visto que un isleño muestre su apoyo a los toros. La Fiesta Nacional. (¡Ganas de tocar los cojones!). Un perdedor nato, o sea, el menda lerenda, aprovecha la ocasión,-dicen que siempre aparece pintiparada- para que ustedes lean a Mario Vargas Llosa, ya que el peruano, español y no sé cuantas cosas más, todas positivas, despliega su saber en El País para apostar una vez más por el toro, por la fiesta, por el arte, por la vida. ¿Quiere? Pues aproveche: http://www.elpais.com/articulo/opinion/Torear/otras/maldades/elpepiopi/20100418elpepiopi_11/Tes
Gracias.
Y de paso, si puede, deje de prestar atención a lo que de vez en cuando se dice o se escribe sobre nuevos proyectos políticos locales. No le eche la culpa ni se desahogue con los escribanos. Lo que tiene que hacer es no prestarle atención a los protagonistas que en el fracaso ideológico, cabreados y apartados, pretenden convertirse en pequeños salvadores de patrias chicas. Y siempre desde la izquierda. ¡Faltaría más! Aunque no dude en pensar, que el fracaso se ha instalado en la política de esquina, en la política de navajazo y garrote que impera en el pueblo
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